El artículo detalla la primera semana de vida de unos gemelos. Aparentemente, cada uno estaba en su respectiva incubadora, y se esperaba que uno falleciera. Una enfermera del hospital peleó contra las reglas del hospital y colocó a los bebés en una sola incubadora.
Cuando los bebés estaban juntos, el bebé más sano colocó su brazo sobre su hermana en un pequeño abrazo. El corazón de la pequeña bebita comenzó a estabilizarse y su temperatura se elevó a lo normal.
No nos olvidemos abrazar a aquellos que amamos, pero tampoco olvidemos que en el mundo hay muchas vidas sin amor que están esperando el toque de una mano amiga, el abrazo de un corazón humano; esperan que las comuniquemos con Aquel que puede transformar su estado de agonía en vida y vida en abundancia.
Sin palabras... Conmovedor.
ResponderEliminarTanto puede dar un abrazo y cuesta tan poco, igual que una sonrisa! Emocionante y mis felicitaciones a la enfermera que se animó a romper las reglas y con eso logró salvar tres vidas, la de los dos hermanitos y la de ella misma, en cierta forma.
ResponderEliminarSaludos :)
A veces lo más simple es lo más milagroso.
ResponderEliminarUn saludo a las dos.